A 10 días de Qatar, el calendario y la enfermería complican a las Selecciones
A diez días del arranque de la Copa del Mundo se vive un clima extraño. A diferencia de otros años y competencias de este estilo, el clima mundialista no logra imponerse del todo en la agenda -y en el ambiente- futbolero. En este punto, esta situación no solo golpea a los hinchas y espectadores, sino que -principalmente- a los más importantes en este espectáculos: los futbolistas. El temor por las lesiones y los compromisos con los clubes enrarecieron el tiempo previo al Mundial de Qatar.
En tan solo diez días, la competencia más importante a nivel selecciones comienza y, todavía, hay noticias negativas con respecto a los jugadores. El calendario se achicó y, en diferentes ligas, los futbolistas se mantienen en competencia. La Selección Argentina tuvo, en este tiempo, una dura noticia: la lesión de Giovani Lo Celso que ocurrió el domingo 30 de octubre. Justamente a menos de un mes para el Mundial. En otras ocasiones, los parates fueron -por ejemplo- un mes y medio antes o más. Si bien la comparación es muy lejana en el tiempo, el equipo de Carlos Bilardo que salió campeón en 1986 comenzó la concentración en México 40 días antes de que arranque el torneo. La decisión era tener a todos los futbolistas con el mayor tiempo posible.
La enfermería del Mundial excede a la Selección Argentina. Son varias las selecciones nacionales que, ya en el mes de noviembre, han tenido bajas de renombre y que preocupan por sus ausencias. Timo Werner y Marco Reus, en Alemania; Philipe Coutinho, en Brasil; Diego Jota y Arthur Melo. A ellos se le suman Son y, quizás, Sadio Mané -en Senegal- que en las últimas horas tuvo una lesión y está en duda para el torneo, luego de haber tenido una lesión en el último encuentro del Bayern Munich, su club. Mientras tanto, los torneos siguen su curso, ya que recién este fin de semana terminarán las respectivas ligas europeas. Entre los jugadores argentinos Nico González, Lautaro Martínez, Lionel Messi y Rodrigo De Paul, entre otros, seguirán atados a sus respectivos clubes.
Esta situación con los futbolistas marca una sola cosa: la puja entre los clubes grandes de Europa y la FIFA es cada vez más grande. Dos corporaciones grandes quieren ser los dueños del juguete del fútbol y hacen fuerza cómo pueden. La reciente búsqueda de la Superliga de Europa, la conformación del grupo de los grandes clubes y la pelea constante por el calendario es una búsqueda para que las Federaciones de Fútbol de los países tengan menos poder. Por esta razón, desde hace varios años, la FIFA busca rápidamente retomar el poder de los torneos y sumar partidos entre diferentes selecciones.
En este sentido, el expresidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, resaltó el martes, que la elección efectuada en 2010 de ese país del oeste asiático como sede “fue un error” del que responsabilizó al entonces presidente de la UEFA, el francés Michel Platini. “Gracias a los cuatro votos de Platini y su equipo, la Copa del Mundo fue a Qatar en vez de a Estados Unidos; esa es la verdad”, disparó Blatter.
Este “error” en el calendario afecta, definitivamente, a la Copa del Mundo que aparece a fin de año, no le entrega tiempo a los jugadores de recuperarse y le da máyor poder a los clubes sobre las selecciones. En el medio, la mayor cita del fútbol mundial, empieza a llorar a sus grandes figuras.