FUTBOL – Manu Lanzini, en modo retro: anotó su tercer gol en La Bombonera y volvió a sonreír en River
En su trigésimo cuarto partido desde su vuelta a River, Manuel Lanzini volvió a gritar un gol. Y no lo hizo en una cancha más: en La Bombonera, donde hace más de una década había convertido por última vez con la banda roja, volvió a ser el verdugo de Boca en el Superclásico.
A los 20 minutos, el ex West Ham habilitó a Facundo Colidio entrando al área, pero nunca abandonó la jugada, y después de que Sergio Romero diera un rebote largo, tras un remate del delantero, no dudó para estampar el 1 a 0 en el área chica.
¿El festejo? Un beso al escudo. Una imagen que ya se había visto… por duplicado.
El 5 de mayo de 2013, por la decimotercera fecha del Torneo Final, Manu conectó de cabeza un centro de Carlos Sánchez, tras jugada individual de Juan Manuel Iturbe, y venció la resistencia de Agustín Orión… ¡a los 43 segundos de iniciado el partido en La Bombonera!
Con ese tanto, el oriundo de Ituzaingó superó a Pablo Ledesma, volante del Xeneize, que en 2007 había festejado ante el Millonario a los 49 segundos, dejando atrás a Norberto Meléndez y Ernesto Mastrángelo, quienes habían festejado al minuto en 1957 y 1972, respectivamente, y se transformó en el futbolista en anotar más rápido en un Superclásico.
A pesar de que finalmente el encuentro finalizó empatado, merced al tanto de Santiago Silva sobre el final del primer tiempo, quedó en los libros de historia por el prematuro gol de Lanzini, que un año después, concretamente el 30 de marzo de 2014, volvió a ser figura en la misma cancha. Aquel día, el conjunto de Núñez cortó una histórica racha adversa en La Bombonera.
Después de una década sin éxitos en la casa del rival de toda la vida, el Millonario, a la sazón dirigido por Ramón Díaz, obtuvo un triunfo clave para, luego, consagrarse campeón del Torneo Final 2014.
Aquel partido, fundamental para que los de la banda roja tomaran la confianza que necesitaban para conseguir el primer título post descenso, tuvo como protagonista a Lanzini, que a los 13′ del complemento, anotó el 1 a 0 parcial: con el Xeneize dominando y buscando la apertura del marcador, un quite de Éder Álvarez Balanta y una combinación con sus coterráneos Carlos Carbonero y Teófilo Gutiérrez derivó en una asistencia de Teo para Lanzini, que se metió en el área local y definió por encima de Agustín Orión.
Sobre la hora, con el cotejo 1-1 por un brillante tiro libre de Juan Román Riquelme, y después de que el 10 consiguiera un córner, que no había sido, el mismo propició el 2 a 1, anotado por Ramiro Funes Mori.
Según se pudo observar en la repetición, el talentoso volante fue el último en impactar la pelota, pero el árbitro Néstor Pitana no observó ese último rebote y cobró tiro de esquina. El resultado: gran centro de Lanzini y anticipo del Mellizo, parte del plantel actual, a Orión, de muy floja salida, para estampar el 2 a 1 final y conseguir el primer triunfo en La Boca en una década.
Conseguido el título de la mano de Ramón, llegó Gallardo. Pero Lanzini apenas jugó un partido bajo sus órdenes, y emigró a Al-Jazira, de Emiratos Árabes Unidos, donde estuvo un año, antes de pasar ocho temporadas en West Ham United, de la Premier League.
A River regresó a mediados de 2023, bajo la conducción de Martín Demichelis, y recientemente el club lo volvió a juntar con Gallardo, que este sábado elogió a su 10: “Claramente estoy muy contento por él. Se lo dije en el vestuario. Venía con esa carga de no haber podido convertir desde que llegó, con algunos problemitas que había tenido, y hoy era un partido para generar ese clic mental en su cabeza y una energía positiva que lo termine de soltar“.
“Lo acompaño a él, como a todos, con la posibilidad de que se sientan con esa confianza y que se saquen esa mochila, que a veces cuesta, porque no es fácil jugar en River, tampoco cuando volvés al fútbol argentino desde el extranjero. A veces se necesitan momentos así para volver a ser, y eso espero de Manu. Estoy contento por él”, concluyó.
Lanzini, de gran primer tiempo y reemplazado a los 70 minutos por Marcos Acuña, después de doblarse el tobillo izquierdo, señaló en ESPN: “Meter un gol en esta cancha lo firmo en cualquier momento. Es increíble, a veces las cosas están escritas. Después de 10 años, volver acá y ganar con un gol mío. Llegué de afuera y no podía convertir mi primer gol. Hacerlo en esta cancha y ganar con un gol mío es increíble”.
“Lo necesitaba a nivel personal. Mas allá de que las cosas no salgan, uno está preparado y siempre trata de dar el 100%, siempre lo voy a dar por esta camiseta. A veces salen, a veces no”, agregó Manu, que valoró el “ADN de Marcelo (Gallardo)” al referirse a la “intensidad” del equipo.
Lanzini y un registro histórico
Convertir tres goles en La Bombonera no es un hito más para un jugador de River. De hecho, según indicó el estadígrafo Gastón Trucco, Lanzini se transformó en el primero en lograrlo en los últimos 40 años.
Los festejos de Manu, en 2013, 2014 y 2024, consiguen inédito desde que Daniel Passarella celebrara por triplicado en La Boca: el Kaiser lo logró en el Nacional 1976, el Metropolitano 1977 y el Nacional 1981, en todos los casos por la vía del penal.
ATENCIÓN AL DATO: ¡Con su gol de hoy, Manu Lanzini se convirtió en uno de los MÁXIMOS GOLEADORES en la historia de River en La Bombonera! pic.twitter.com/BU0l3zYhrD
— SportsCenter (@SC_ESPN) September 21, 2024