Lo Celso es el último de una amplia lista de lesionados premundialistas
La lesión muscular de Giovani Lo Celso que lo saca del Mundial de Qatar tiene un nutrido marco de antecedentes que frustraron a último momento las ilusiones de muchos futbolistas por participar de la máxima competencia internacional de selecciones nacionales.
Tomando como referencia el último Mundial que ganó Argentina en México 1986, un jugador símbolo como Daniel Passarella, el “Gran Capitán” campeón en 1978 fue parte de la delegación encabezada por Carlos Bilardo, pero una vez en suelo azteca una infección intestinal le impidió participar de lo que hubiese sido su segunda conquista ecuménica en cancha.
Passarella, el gran referente de César Luis Menotti en el hasta entonces único campeón del mundo que tenía Argentina, se quedó al margen de esa competencia pero sin padecer lesión alguna, sino por otra cuestión ligada con lo intestinal, y dado el enfrentamiento generado entre el “Flaco” y el “Narigón”, su ausencia provocó, y aun provoca, todo tipo de especulaciones al respecto.
Otro “menottista” de ley como Jorge Valdano, que sin embargo había salido campeón mundial en México 1986, también se terminó quedando a último momento fuera de Italia 1990 luego de recuperarse de un severo cuadro de hepatitis.
Bilardo le pidió que hiciera un esfuerzo supremo para estar en Italia, pese a que se había retirado un par de años antes, y el ex Real Madrid lo hizo, pero al momento de dar la lista definitiva el técnico le dijo que no lo veía como él quería y lo dejó afuera. “Nadé, nadé, y me ahogue en la orilla”, fue la frase con la que Valdano graficó esa situación.
Otros referentes de aquel campeón del mundo en México como los defensores José Luis Brown (con una afección meniscal en la rodilla derecha) y Néstor Clausen (con repetidas lesiones musculares) también fueron baja de última hora.
El Mundial de los Estados Unidos 1994 pasó a la historia por el doping de Diego Maradona, pero en la previa el espigado volante de Newell’s Old Boys, Darío Franco, vio frustrada su participación por una fractura de tibia y peroné de la pierna derecha provocada por una fuerte infracción del defensor boliviano Marco Sandy durante un partido entre ambos seleccionados jugado un año antes en la Copa América de Ecuador.
Franco volvió a la actividad ya entrado 1994 pero no volvió a recuperar su nivel, ese que lo había llevado al técnico Alfio Basile a convertirlo en elemento importante del equipo. Por eso el “Coco”, si bien lo dejó al margen de los 22 convocados, lo llevó igual a los Estados Unidos como reconocimiento a su entrega por el equipo a lo largo de todo el ciclo.
No se registraron casos similares antes de Francia 1998, pero ya en Corea-Japón 2002 y con Marcelo Bielsa al frente de la selección, el hoy componente del cuerpo técnico de Lionel Scaloni, Roberto Ayala: sufrió una lesión muscular durante el calentamiento previo al debut frente a Nigeria, y como Argentina no superó la fase de grupos, no pudo participar de ese, su segundo Mundial. Después tendría revancha en Alemania 2006, donde inclusive le convirtió un gol de cabeza al equipo local.
En Alemania no hubo tampoco episodios que impidieran a algún jugador quedarse de a pie a último momento, ni en el siguiente en Sudáfrica 2010, con Diego Maradona en la dirección técnica, pero sí en Brasil 2014, cuando Alejandro Sabella decidió cortar sobre la hora a un referente como Ever Banega, que sufría una merma física luego de padecer una afección pulmonar, más allá de que había regresado al país para ganar rodaje en Newell’s Old Boys y tampoco pudo conseguirlo.
Y ya en el Mundial anterior, en Rusia 2018, hubo dos casos sucesivos, el primero a tres semanas del Mundial cuando el técnico, Jorge Sampaoli, marginó al arquero Sergio “Chiquito” Romero por una lesión en la rodilla derecha que el entrenador juzgó decisiva para impedirle disputar su tercera Copa del Mundo consecutiva.
Una semana antes de la competencia se terminó también la ilusión para el volante ex River Plate, Manuel Lanzini, hoy en el West Ham inglés, que padeció una lesión más grave aun que la de Romero en la misma rodilla derecha: la rotura del ligamento cruzado.
Y ahora, a una docena de días de la Copa del Mundo de Qatar 2022, el rosarino Lo Celso, de 26 años, también se quedó al margen de su segundo Mundial consecutivo, luego de ir a Rusia 2018 pero no jugar ni un minuto de los cuatro partidos que jugó Argentina en ese certamen.
Con información de Télam