RUGBY – La drástica decisión de un jugador de Gales para no terminar su carrera

El tercera línea de Dragons, Shane Lewis-Hughes, reveló que debió tomar una difícil pero necesaria decisión: someterse a la amputación de su dedo anular tras años de lidiar con un dolor constante. Viví lo mejor del rugby en Disney+.

El forward sufrió hace ocho años una lesión que empeoró con el tiempo, dificultando tanto su vida cotidiana como su desempeño en el juego, y finalmente optó por extirpar el dedo hasta justo por encima del nudillo.

“He estado lidiando con ello desde 2016”, confesó en declaraciones oficiales a su club. Aunque inicialmente no afectaba su juego, en 2020 el dolor se intensificó. En 2021, tras una cirugía de hombro, decidió fusionar el dedo, pero esto limitó su movilidad y continuó siendo un problema.

“No puedo cerrar el puño ni doblarlo bien. La fusión me quitó algo de dolor, pero en un deporte de contacto, necesitas poder agarrar cosas”, explicó.

Descrito como “un dolor de muelas muy fuerte combinado con descargas eléctricas”, se volvió insoportable durante un partido contra Connacht en octubre. La cirugía, que en principio estaba planeada para después de la temporada, se adelantó.

“Tendrá un gran impacto en mi vida en el futuro. Ya no tendré dolores, podré hacer bien mi trabajo”, afirmó el jugador de 27 años, quien espera volver a jugar en tres o cuatro semanas.

Lewis-Hughes, que suma tres caps con Gales, destacó que la amputación no solo mejorará su rendimiento, sino que también eliminará riesgos mayores: “Me dijeron que, si seguía infectándose, podría perder la mano o incluso el brazo”. Y concluyó: “La noticia positiva es que, una vez que te amputan el dedo, no pierdes fuerza”.