El crecimiento exponencial del deporte femenil
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La forma en la que los medios difunden la actividad deportiva ha sido un factor importante en la ecuación para que las mujeres sigan sumando afición.
Si hablamos de mujeres en el deporte, podríamos pasar horas tocando el inicio de lo que hace años era un sueño, y hoy es una grata realidad.
Ha costado tanto, que no es extraño que su crecimiento se esté volviendo exponencial. Aún recuerdo hace más de 20 años, cuando la WNBA inició, que muchos personajes de los medios y amigos me decían que era una liga que no iba a durar, pues bien, aquí sigue, y es una de las ligas con mayor crecimiento en exposición.
La forma en la que los medios difunden la actividad deportiva ha sido un factor importante en la ecuación para que las mujeres sigan sumando afición.
Vayamos a la historia. En la antigüedad existen algunas imágenes de mujeres participando en eventos deportivos, teniendo sus momentos antes y después de Cristo. En la era moderna, el olimpismo fue uno de los primeros en dejarlas participar. Existen algunos documentos que avalan a los equipos de béisbol. En St Andrews, Escocia, se fundó el primer club de golf en 1886 con 500 afiliadas. En 1874, Mary Ewing Outerbridge llevó el tenis a Estados Unidos en Staten Island.
Así podríamos ir señalando cada espacio que han ganado y conquistado las mujeres, y vuelvo a la WNBA, la liga profesional que inició esto. Sé que la WPGA (Women Professional Golf Association), la WTA (Women Tennis Association) y otros circuitos llegaron antes, y son también, sumamente importantes en el desarrollo y la consolidación del deporte femenil.
Hablo de la WNBA debido a que hace algunos días, sportico.com sacó la nota de los 100 equipos deportivos más valiosos del mundo, y al momento no existe un solo representante de las mujeres. Por ello me di a la tarea de ver qué franquicias femeniles son las que podrían alcanzar en un momento a los Flyers de Filadelfia de la NHL, cuyo valor es de 1.65 mil millones de dólares.
El crecimiento que la WNBA está teniendo en preferencia de televidentes, hace que este sea el que lleve a una de sus franquicias a alcanzar este sitio, aun cuando los equipos de la liga Premier femenil de Cricket alcanzan una media de 114 millones de dólares, su exposición es muy poca a nivel mundial.
Más allá del futbol, el baloncesto de mujeres, desde la raíz que es la NCAA, está siendo un reflector y un catalizador para darle su merecido lugar al deporte del que estamos hablando,que tiene un encanto muy especial por las entrega que caracteriza a estas atletas.
Hace algunos días, Caitlin Clark superó la marca de Kelsey Plum de más puntos anotados que era de 3,527 unidades, y ahora va por la de “Pistol” Pete Maravich, quien con los Tigres de LSU sumó 3’667 puntos en los años 70´s, cifra que está muy cerca de alcanzar la jugadora de los Hawkeyes de Iowa. Con juegos de temporada regular por delante y con el torneo del Big 10, además del final four, tendremos a una nueva poseedora de la marca del baloncesto de la NCAA en el renglón de puntos anotados.
Y no hay que detenerse ahí, hay que recordar que uno de los eventos más esperados del juego de las estrellas de la NBA, que se celebró el pasado 18 de febrero en la casa de los Pacers el Gainbridge Fieldhouse de Indianápolis, Sabrina Ionescu le peleó de tú a tú al mejor tirador de 3 de la historia del basquetbol, Stephen Curry. El concurso fue un deleite, mostrando y reafirmando sus palabras, cualquiera puede tirar, reafirmando que no importa el género en el deporte, importa la calidad y el talento.
De hecho, la WNBA en audiencia ha crecido inmensamente, subiendo un 27% del 2022 a la temporada que acaba de terminar, siendo muy superior a otros deportes. El costo de las franquicias también irá incrementado, el promedio de cada equipo es de 35 a 45 millones de dólares, pero con la reciente adquisición de los derechos de un equipo para los Golden State Warriors, que pusieron en la mesa 50 MDD, esto se incrementará, y además que el Seattle Storm vendió acciones y ahí se le valuó en 151 MDD.
Todo esto aunado a que las audiencias de la NCAA han alcanzado cifras récord en las cadenas que transmiten la temporada regular. Haciendo que el deporte ráfaga femenil sea uno de los principales en audiencia mundial, porque no hay que olvidar que otros países tienen sus ligas profesionales y que poco a poco van ganando terreno.
En el Softbol, fue durante la pandemia el primer deporte en activarse en su versión femenil en los Estados Unidos, con la liga Athletes Unlimited mostró la fuerza que tiene en el país de las barras y las estrellas, de hecho, la Serie Mundial de Softbol (Women College World Series) que se realiza en el estadio USA Softball Hall of Fame en Oklahoma City, tiene un 38% más televidentes que la versión varonil en el béisbol, superando el millón en promedio por juego.
Y qué decir del futbol, la NWSL (National Women Soccer League) firmó un acuerdo millonario en los Estados Unidos que deja atrás a su hermano la MLS, por un contrato por 240 millones de dólares con varias televisoras, entre ellas ESPN.
Rematando con la Copa Mundial Femenina de la FIFA, un torneo sin precedentes en el deporte con un registro histórico para el futbol femenil, un evento que pone los reflectores para que las marcas publicitarias volteen a ver a las mujeres en el medio deportivo.
Nos siguen enseñando que el deporte se trata de talento y corazón.