Ja Morant admitió que ha tenido “algunos días horribles” mientras cumplía sus 25 partidos de suspensión.

MEMPHIS, Tenn. — Haber sido suspendido por los primeros 25 juegos de la temporada de la NBA fue difícil para el dos veces All-Star Ja Morant, quien dijo este viernes que tuvo “algunos días horribles” mientras trabajaba para concentrarse en sí mismo fuera del baloncesto.

El base de los Memphis Grizzlies no dijo que se arrepiente de haber sido suspendido por el comisionado de la NBA, Adam Silver, por segunda vez en el lapso de cuatro meses.

“Al final, siento que me hizo sentir mejor”, reveló Morant. “Siento que aprendí algunas cosas sobre mí que aprendí durante ese proceso. Fue muy revelador. En cierto modo me dio una nueva visión de la vida. Cómo vivo mis días; cómo me comporto”.

La suspensión de Morant termina el martes, día en el que estará disponible para jugar con los Grizzlies frente a los New Orleans Pelicans en la segunda noche de una gira consecutiva como visitante. Morant dijo que ha estado contando los días hasta su regreso y que está agradecido de seguir aquí.

La segunda selección general del draft de 2019, el Novato del Año de la NBA 2019-20 y el Jugador con Mayor Progreso de 2021-22 ha sido suspendidos por 33 juegos combinados desde que fue sorprendido apuntando con un arma por primera vez en una transmisión en vivo en las redes sociales el 4 de marzo.

Morant dijo a los periodistas después de que Los Angeles Lakers eliminaron a Memphis de los playoffs en abril que tenía que tomar mejores decisiones, sabiendo que los problemas fuera de la cancha afectaban la temporada de los Grizzlies. Un equipo que obtuvo un segundo puesto consecutivo en la Conferencia Oeste duró solo seis partidos en la postemporada.

Solo dos semanas después, Morant estaba cantando con amigos en un vehículo cuando levantó una pistola durante un video transmitido en vivo. Silver sopesó la situación y anunció la segunda suspensión junto con otras medidas para Morant.

Eso incluyó hablar semanalmente con la oficina de la NBA y la Asociación Nacional de Jugadores de Baloncesto.

Morant también habló personalmente con Silver esta semana, una conversación que calificó de buena y un control por parte del comisionado sobre cómo le está yendo.

El guardia sabe que simplemente hablar de ser un mejor líder para Memphis no será suficiente. Silver ha dejado en claro que Morant debe cumplir con un estándar más alto para jugar en la NBA.

“No puedo, ya sabes, hacer que nadie me crea fuera de mis acciones”, admitió Morant. “Así que responder esta pregunta con solo palabras probablemente no significará nada para nadie”.

Al base, que no muestra miedo en la cancha cuando conduce hacia la canasta, no se le preguntó el viernes si todavía tiene armas.

Morant dijo que el baloncesto ha sido su terapia a lo largo de su vida y que quitarle el juego hizo las cosas más difíciles. Le dio crédito a su familia, a los Grizzlies y a otros, incluida la terapia, por ayudarlo desde que Silver dictó la segunda suspensión de Morant a mediados de junio.

Estaba sonriendo y bromeando con sus compañeros de equipo en la práctica de tiro de este viernes por la mañana, señalando cuándo uno de sus tiros habría entrado si no fuera por la pelota de otra persona que desvió su intento.

Según los términos de su suspensión, a Morant se le ha permitido practicar y viajar con los Grizzlies y participar en los tiros matutinos. Pero ha tenido que irse y no estar en la arena mientras juega Memphis. Eso lo ha dejado como animador en las redes sociales en el único rol disponible para él durante los primeros 25 juegos.

Morant dijo que está contando los días hasta poder hacer su debut de temporada el martes por la noche en Nueva Orleans.