Paige Bueckers de UConn, ‘muy cerca’ en recuperación de rotura de LCA

STORRS, Connecticut — La estrella de UConn, Paige Bueckers, la jugadora nacional del año 2020-21, está “muy cerca” de recibir el alta médica mientras regresa de un desgarro del ligamento cruzado anterior que sufrió en agosto de 2022 que la dejó fuera de juego durante toda su temporada de tercer año universitario.

“Me siento muy bien”, dijo Bueckers a los periodistas en UConn el miércoles. “Acabo de pasar la marca de los 10 meses [después de la lesión y la cirugía]. Así que definitivamente estoy empezando a ver la luz al final del túnel y la marca final. Pero hay un largo camino por recorrer. Las recuperaciones de LCA tomar mucho tiempo.

Bueckers dijo que está jugando 3 contra 3, 2 contra 2 y 1 contra 1 en entrenamientos individuales y de equipo, pero no ha sido autorizada para el trabajo 5 contra 5, al que llamó “el último pequeño punto de referencia para recibir el alta médica por completo”.

“Pero no tengo prisa”, dijo Bueckers. “Todo nuestro equipo y personal no tiene prisa. Tenemos mucho tiempo”.

Al ingresar a su temporada de cuarto año, Bueckers está regresando de su segunda lesión importante en la rodilla en dos años. Después de ganar una serie de elogios nacionales individuales como estudiante de primer año en su única temporada universitaria completamente sana, apareció en solo 17 juegos como estudiante de segundo año después de sufrir un desgarro de menisco lateral y una fractura de meseta tibial, también en la rodilla izquierda, a mitad de temporada.

Bueckers ha guiado a las Huskies a dos Final Fours, incluido el juego por el título nacional de 2022, donde cayeron ante South Carolina. La temporada pasada con Bueckers al margen, Ohio State sorprendió a UConn en el Sweet 16, rompiendo la racha sin precedentes de 14 temporadas del programa de apariciones consecutivas en el Final Four.

Bueckers no estaba segura de cuál sería exactamente el plan para la próxima gira europea de UConn en Croacia, Eslovenia e Italia en agosto, y agregó que “probablemente podría” jugar en juegos de exhibición allí, pero ella y el equipo tomarán una decisión después de evaluar todos los pros y contras.

Bueckers dijo que se siente aún más fuerte y en mejor forma que antes de las lesiones, y que está cuidando mejor su cuerpo. Ella dijo que sabe que puede llevar algún tiempo volver a la cancha, pero eso no impedirá que tenga grandes expectativas para sí misma.

“Quiero ser el tipo de jugadora que era antes, antes de la lesión, pero mejor”, dijo Bueckers. “Tengo esas expectativas para mí misma, así que ahí es donde quiero estar”.

Incluso aparte de Bueckers, los Huskies fueron devastados por las lesiones en las últimas dos temporadas. Su compañera, la ex recluta No. 1, Azzi Fudd, se perdió tiempo como estudiante de primer año por un problema en el pie y estuvo fuera de juego durante dos temporadas separadas como estudiante de segundo año con lesiones en la rodilla, jugando 15 juegos en total. Regresó a tiempo para los torneos Big East y NCAA, pero no era la versión de sí misma que cautivó al país al comienzo de la temporada.

“Estoy orgullosa de mí mismo por regresar. Pero cuando las cosas se pusieron más difíciles al final de la temporada, no estoy orgullosa de cómo respondí”, dijo Fudd. “Así que creo que de cara al próximo año, eso es algo que arreglaré. Creo que responsabilizarnos mutuamente será una gran parte de nuestro equipo el próximo año y sé que, digamos que mi respuesta no es excelente, van a estar allí para hacerme saber que necesito arreglarlo”.

Tener a Bueckers y Fudd en la defensa ha generado mucha expectación, ya que los fanáticos de UConn han buscado ganar el primer campeonato del programa desde 2016, y el duodécimo en general. En cambio, el dúo de estrellas ha jugado en solo 15 juegos juntas en dos temporadas.

Después del torneo de la NCAA, Fudd trabajó en la rehabilitación de su rodilla, pero ahora ya no tiene el aparato ortopédico que usó para terminar la temporada y está a punto de recuperarse por completo. Ella ha estado muy activa durante los entrenamientos del equipo este mes y espera que ya no usar el aparato ortopédico la ayude a recuperar su respuesta de contracción rápida.

Fudd dijo que la derrota del Sweet 16 ante Ohio State todavía está fresca en su mente de cara a la campaña 2023-24. Terminó con 14 puntos en 6 de 17 tiros ese juego, incluidos 2 de 9 desde el rango de 3 puntos, y tuvo cuatro de las 25 pérdidas de balón de UConn.

“Todavía tengo ese sentimiento de frustración y enojo y todo eso del último juego”, dijo Fudd. “Eso todavía lo siento cuando estoy en la cancha. … Y creo que todas estamos en un espacio diferente donde sabemos lo que tenemos que hacer, sabemos cómo responsabilizarnos las unas a las otras, cómo debemos prepararnos para no dejar que esas cosas vuelvan a suceder. Creo que puedo hablar en nombre de todo el equipo y decir que no quiero volver a sentir eso nunca más”.

UConn ocupa el segundo lugar en el Ranking Top 25 “Demasiado pronto”, reemplazado en el primer puesto por el campeón defensor LSU. Las Tigers traen de vuelta a la Jugadora Más Destacado de la Final Four, Angel Reese, y se sacaron la lotería en el portal de transferencias al traer a Hailey Van Lith de Louisville y Aneesah Morrow de DePaul, lo que ha generado conversaciones sobre emerger como un súper equipo.

Bueckers, quien junto con Fudd no es ajeno a enfrentar grandes expectativas, dijo que las Tigers “tienen derecho a hablar y tienen los medios para respaldarlo porque ganaron, y aún no lo hemos ganado”.

“Creo que estamos tratando más de ganarnos nuestro respeto en la cancha, y tenemos que demostrarlo porque realmente no hemos probado nada todavía, desde que estoy aquí”, dijo Bueckers. “Así que creo que estamos más preocupadas por nosotras mismas y por estar listas para ese escenario y esa plataforma y ese tipo de grandes juegos. Definitivamente estamos más centradas en el interior y solo tratamos de asegurarnos de que estamos listas para esos momentos”.