RUGBY – Italia y la mejor campaña de su historia en el Seis Naciones

Lo que se vaticinaba luego de la ajustada y celebradísima victoria frente a Escocia finalmente aconteció: tras superar a Gales en el último partido del certamen, Italia cosechó su mejor actuación histórica dentro del Seis Naciones. El arribo de Gonzalo Quesada tuvo un rápido efecto positivo, aunque no hay que restarle mérito al ciclo del neozelandés Kieran Crowley, ya que profundizó los conceptos a la hora del armado de juego, sin dejar de lado el aguerrido aspecto defensivo de La Azzurra.

El camino a esta gesta histórica para el rugby italiano no comenzó de la mejor manera. El esperado debut del técnico argentino fue nada más y nada menos que ante Inglaterra, ante un colmado Estadio Olímpico de Roma, donde se comenzó a ver el sello Quesada pero no fue suficiente, ya que La Rosa terminó triunfando por tan sólo tres puntos de diferencia. Luego de un primer tiempo entretenido, que terminó con los anfitriones arriba en el marcador, el cansancio les jugó una mala pasada y no pudieron aguantar la remontada inglesa, que contó con pinceladas de su juego más la efectivad del apertura George Ford. A pesar de la dura y ajustada caída, se comenzaba a vislumbrar que el equipo se animaba aún más a desplegar e imponer sus ideas, confiando en una base que les depararía aún más en un futuro no tan lejano.

El segundo paso fue el mas duro en este recorrido, ante Irlanda que lo terminaría rubricando con el bicampeonato, fue un hueso demasiado duro de roer para un combinado en formación, lo cual se terminó plasmando en el resultado final: un categórico 36-0 que vistió de fiesta a todo el Aviva Stadium de Dublín. Rescatar algo bueno de esta jornada es complicado, ya que de principio a fin sólo un conjunto tuvo el monopolio del juego, sometiendo al otro a aguantar como podía. La visita tuvo buenas intenciones e intentó mostrar por momentos algo de lo que había insinuado en la primera fecha, pero se encontró con un muro verde que fue implacable durante los 80 minutos.

La tercera jornada iba a ser agridulce. Leer en frío un 13-13 ante Francia en suelo galo sería motivo de festejo en otra época, pero este fue un pleito muy particular. Les Blues fueron claramente superiores en la primera mitad, pero la expulsión de Jonathan Danty le dio vida a los italianos para comenzar a mostrar otra cara en el complemento. Motivados por el orgullo, el combinado del exapertura de Los Pumas mostró una agresividad ofensiva distinta, lo cual se sumó al cansancio que fueron mostrando los locales a medida que transcurrían los minutos. La conquista de Ange Capuozzo empató el encuentro cuando restaban diez minutos, los cuales fueron dignos de documentar. La última palabra la tuvo Paolo Garbisi, pero su patada terminó dando en el poste, lo cual evitó un histórica victoria en territorio francés.

Las tres primeras funciones fueron como un recorrido en una montaña rusa, con subidas y bajadas bruscas, pero sin la constancia necesaria para comenzar a obtener resultados, lo cual mutaría en las últimas dos jornadas. La cuarta parada sería la vuelta a Roma, pero esta vez recibiendo a Escocia, que era uno de los que le disputaba el título a Irlanda. Luego de un intenso primer tiempo, que finalizó a favor del Cardo, se necesitó de una nueva remontada italiana, pero esta vez si hubo un final feliz. A base de una estrategia clara y sencilla, que involucró los buenos pies de Paolo Garbisi y Louis Lynagh, los dueños de casa fueron arrinconando a la visita para ganar terrerno en el campo y en el marcador. Pero el orgullo y la fiereza escocesa iban a reaparecer en los minutos finales, por lo que se necesitó de una fina y disciplinada defensa para aguantar primero y festejar después lo que fue el 31-29 final, que marcó la primera victoria de la era Quesada y no fue sólo ello, ya que la Azzurri volvió a ganar en su suelo tras once años de sequía.

El último tramo de este recorrido terminó siendo Cardiff, lugar donde se terminó firmando una de las mejores actuaciones italianas en la historia del prestigioso certamen europeo. El resultado 24-21 engaña un poco, ya que los Dragones Rojos pudieron recién acercarse sobre el final. Cabe destacar la actuación de Juan Ignacio Brex en estas dos victorias, donde el forward nacido en Argentina fue la figura excluyente, siendo nominado como el Jugador del Partido en ambas ocasiones. El empate ante Francia, que parecía ser algo más amargo que dulce en un principio, fue el extra que le terminó otorgando este porte a la campaña, ya que en sólo habían conseguido dos triunfos en una misma temporada en el 2007 y 2013.

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